El reto era mayúsculo. Palacio de los Deportes ofrecía su mejor gala. 8.000 espectadores y todas las entradas vendidas. El gol de Gréllo en el cuarto partido ensalzó la ilusión de los aficionados de ElPozo de derrotar al Barça en el quinto y definitivo partido de la final. La 'marea roja' estaba dispuesta a revivir una noche histórica y de romper la sequía de dos temporadas sin levantar un título.
El partido empezó con un cierto respeto y dando la sensación que los jugadores sabían que, esta vez sí, el título estaba en juego de verdad. Tras los primeros intentos de sorprender a Cristian y Rafa, llegó la primera jugada polémica. Gabriel se anticipó en un balón que luchaba Álex dentro del área y Gutiérrez Lumbreras pitó penalty. Carmona cambió a Cristian por Paco Sedano en la portería y el de Móstoles ensanchó la leyenda de 'parapenalties' desviando el disparo de Esquerdinha. El Barça Alusport daba el primer golpe psicológico.
Sin tiempo para lamentaciones, ElPozo no bajó el ritmo alto de partido y fruto de la insistencia en ataque permitió, a continuación, a De Bail marcar el 1-0 con un disparo colocado. El Palacio de los Deportes enloquecía. Pero un minuto más tarde, Javi Rodríguez, con un toque preciso en la frontal del área, establecía el empate. Gol balsámico y esperanzador. Los azulgrana se sintieron más fuertes hasta el descanso. Y Sergio Lozano podía haber dado ventaja a los azulgranas, pero su lanzamiento de doble penalty se estrelló en el palo. Fin del primer acto.
En la reanudación, ElPozo jugó al límite agotando toda la energía que le quedaba. El equipo de Duda, con el balón en los pies y con la mobilidad que ofrecía Dani Salgado, mareó a los azulgrana. Hasta que, Esquerdinha marcó el 2-1 en una jugada marca de la casa del brasileño. Era un momento clave del partido. Pero otra vez apareció Javi Rodríguez. El gran capitán empataba con un gol de pícaro dentro del área con la duda si se ayudó con el brazo antes de bajar el balón a la red. Sólo habían pasado 12 segundos.
El partido se aceleraba y ElPozo buscaba otro mazazo. Un roce entre Javi Rodríguez y Kike dentro del área azulgrana acabó con otro penalty muy riguroso pitado, una vez más, por Gutiérrez Lumbreras. El banquillo azulgrana, con las manos en la cabeza, no se lo podía creer. Esta vez, Miguelín superó a Paco Sedano y establecía el 3-2. Los azulgrana quedaron muy tocados, pero quedaba tiempo para volver a empatar y llegar a la prórroga. Marc Carmona se la jugó con Saad de portero-jugador y en una jugada de estrategia, Sergio Lozano fusiló Rafa estableciendo el 3-3. Empate y prórroga.
Y en la prórroga, los azulgrana dieron la estocada definitiva. Cómo en el primer partido de la serie. Lozano puso por delante en el marcador por primera vez al Barça con un golazo por toda la escuadra en un lanzamiento de doble penalty apenas empezar el añadido de 5 minutos. Duda situó a Gréllo de portero-jugador y los azulgrana demostraron porque son mejores en defensa. Saad, sublime, exhibió todo su potencial y apareció Wilde para marcar dos goles consecutivos que sellaban la segunda liga azulgrana. Antes de acabar, Miguelín envió el balón fuera del marco de Cristian en el último lanzamiento de doble penalty.
Antes de la conclusión del partido y mientras el Palacio de los Deportes increpaba a los jugadores del Barça, el técnico Marc Carmona dio un mensaje prodigioso a sus jugadores en el banquillo: "se tiene que saber perder, pero también se tiene que saber ganar". Una muestra más de los valores que promueve el Barça y que Carmona utilizó para bajar el suflé de la euforia azulgrana en territorio hostil.
El Barça saboreaba la victoria hasta que llegó una imagen más para la historia. Javi Rodríguez levantando el título liguero y su último como jugador azulgrana. El colomense no habría soñado con un final más brillante. En su último partido marcó dos goles decisivos y puso el colofón a seis temporadas para enmarcar.
La primera liga siempre será especial para ser la primera. Pero la segunda tiene más valor porque se ha ganado a un Pozo inmenso que ha acabado perdiendo porque alguien tenía que levantar el título. Un título que alarga la época dorada del Barça Alusport y que cierra una temporada irrepetible. El equipo de Carmona ha demostrado una capacidad de sufrimiento exquisita. Se ha levantado en dos ocasiones y ganó en el quinto encuentro la final más exigente.
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